REFUERZA TU SISTEMA INMUNE CON HÁBITOS SALUDABLES
Comenzamos un nuevo mes y es el momento perfecto para renovar nuestro compromiso con la salud y fortalecer nuestro sistema inmunológico. Con la temporada de resfriados y gripes en pleno apogeo, es crucial adoptar hábitos saludables que nos ayuden a mantenernos fuertes y protegidos.
¿Comenzamos?
Aquí tenemos algunos tip´s para fortalecer tu sistema inmunológico de forma natural este mes:
Alimentación Balanceada: Consumir una dieta rica en frutas, verduras, granos enteros y proteínas magras proporciona los nutrientes necesarios para un sistema inmunológico fuerte. Incorpora alimentos ricos en vitamina C, como naranjas, fresas y brócoli, así como alimentos ricos en zinc, como nueces, semillas y legumbres.
Pero no sólo es lo que consumes, sino cómo lo vas a consumir: incorpora a tu rutina hábitos saludables:
• Desayunar regularmente.
• Comer de forma relajada y sin prisas. Nos saciamos antes y saboreamos mejor la comida.
• Consumir alimentos variados. Lograr que nuestra alimentación sea variada, agradable, suficiente y adaptada a nuestras características.
• Aumentar el consumo de pescado, sobre todo el graso que es rico en omega 3 y 6, en relación al consumo de carne.
• Aumentar el consumo de legumbres. Son una buena fuente de proteína vegetal de muy buena calidad.
• Aumentar el consumo de alimentos ricos en fibra, para facilitar nuestro tránsito intestinal. Y aprovecharnos de su efecto saciante.
• Utilizar el aceite de oliva como fuente principal de grasa alimentaria.
• Hacer 5 comidas al día, y evitaremos el picar entre horas.
Para todo esto, es muy importante planificar de antemano los menús y así hacer la lista de la compra sin caer en tentaciones como el pasillo de los dulces o de los snacks.
Tan solo seguir una dieta mediterránea, cumpliendo lo anterior, y notaremos cambios.
Hidratación: Mantenerse hidratado es esencial para una buena salud en general y para un sistema inmunológico fuerte. Bebe suficiente agua durante todo el día y limita el consumo de bebidas azucaradas o con cafeína.
El agua acelera el metabolismo, elimina toxinas y controla el apetito y la ansiedad, mantén un termo y contabiliza cuánto tomas al día.
Descanso adecuado: El sueño es fundamental para la salud inmunológica. Asegúrate de dormir de 7 a 8 horas cada noche para permitir que tu cuerpo se recupere y repare adecuadamente.
Asegurate de que tu descanso sea reparador:
• Establece rutinas de sueño: levántate e intenta ir a dormirte a la misma hora todos los días.
• Crea un ambiente propicio para dormir: luz tenue antes de acostarte para indicarle a tu cerebro que comienza el tiempo de descanso. Que tu habitación esté fresca y silencios. Además el orden es muy importante en el sueño, procura que el espacio donde vas a dormir esté en armonía.
• Nada de pantallas antes de acostarte: la luz azul de los dispositivos electrónicos puede alertar tu sueño.
• Limita la cafeína, teína y alcohol antes de dormir.
• Practica hábitos de relajación antes de irte a dormir: prueba a meditar, o hacer aspiraciones profundas, o estiramientos suaves.
Duerme bien, y despertarás renovada y llena de energía pra afrontar el nuevo día.
Ejercicio regular: La actividad física regular no solo ayuda a mantener un peso saludable, sino que también puede mejorar la función inmunológica al aumentar la circulación y promover la liberación de endorfinas.
Gestión del estrés: El estrés crónico puede debilitar el sistema inmunológico, así que encuentra formas saludables de manejar el estrés, como la meditación, el yoga o simplemente tomarte un tiempo para relajarte y hacer actividades que disfrutes.
Recuerda que cada persona es diferente, así que dedica tiempo a encontrar la estrategia que mejor funcione para ti.
Suplementos: consulta a profesionales de la salud sobre la posibilidad de tomar suplementos que puedan apoyar tu sistema inmunológico, como vitamina D, probióticos, zinc, o suplementos de hierbas adaptogénicas. Puedes consultarnos sin compromiso, somos tu herbolario de confianza!
Higiene personal: Practica buenos hábitos de higiene, como lavarse las manos con frecuencia, especialmente antes de comer o después de estar en lugares públicos. Durante la pandemia nos concienciamos de que era una medida preventiva, y es un buen hábito encargarse de la prevención, en lugar de la curación. ¡Sigamos con ellos!
Contacto con la naturaleza: Pasar tiempo al aire libre y en contacto con la naturaleza puede tener beneficios para el sistema inmunológico, así que intenta hacer caminatas al aire libre o simplemente relajarte en un parque cercano. Y si tus paseos los haces de manera consciente, ¡mucho mejor! Practica la meditación andando por zonas verdes, un regalo para la mente y el alma.
Al adoptar estos hábitos saludables este mes, puedes fortalecer tu sistema inmunológico de forma natural y estar mejor preparado para enfrentar los desafíos de la temporada. Recuerda que la salud es un viaje continuo, y cada pequeño paso que tomes hacia hábitos más saludables marcará la diferencia en tu bienestar a largo plazo.
¡Cuida de ti mismo y de tu sistema inmunológico este mes y todos los meses!